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Equipo del programa

domingo, 19 de abril de 2015

Cartas a LA NACION 19-04-15

DESCONCIERTO

En estos últimos días hemos sido testigos de la algarabía en el mundo "occidental y cristiano" por el acuerdo alcanzado por Washington con el otrora régimen terrorista de los ayatollahs. Casi simultáneamente vemos el regocijo de este mismo "mundo" por el acercamiento de los Estados Unidos con el sanguinario régimen Castro-comunista y por las supuestas negociaciones de paz con la organización narcoterrorista FARC -bajo las condiciones impuestas por ésta y llevadas a cabo en La Habana-, que tanta sangre les han costado al pueblo colombiano y a otros países de la región. En nuestro país vemos cómo reconocidos terroristas gozan del beneplácito de políticos y periodistas. Es así como Eduardo Anguita, que en la noche del 5 al 6 de septiembre de 1973 (gobierno constitucional de Raúl Lastiri) asaltó el Comando de Sanidad del Ejército, y asesinó al coronel (PM) Raúl Juan Duarte Ardoy e hirió a varios oficiales, suboficiales y soldados, fue elegido por el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, para que presentara un libro de su autoría y, además, es directivo en la televisión pública. Otros personajes que en los 70 se alzaron en armas contra la Nación gozan del reconocimiento social como escritores, periodistas, legisladores, jueces, funcionarios públicos, etcétera, omitiéndose su pasado criminal. Todo esto no debería llamar la atención, por cuanto todo lo que se haga en beneficio de la paz y la concordia entre naciones o en el país es siempre bienvenido y necesario. Pero lo que me genera un gran desconcierto es que quienes, en cumplimiento de órdenes emanadas de gobiernos constitucionales, tuvimos la misión de combatir al terrorismo, hoy nos encontramos denostados, agraviados y sometidos al escarnio público, y que más de 2000 miembros de las FF.AA., de seguridad, policiales y penitenciarias y civiles -de los cuales 290 ya han muerto, víctimas del plan criminal de exterminio de un sector de la población, diseñado por la corporación político-judicial- hoy sufran privación de libertad, nada menos que por haber liberado a la Nación y a su pueblo de aquel flagelo terrorista.
Tte. Cnel (R) Emilio Guillermo Nani
LE 4.526.260